No voy a cambiar ni el título para no perturbar la belleza de este vídeo tan maravilloso que me ha hecho llegar mi amigo Antonio Solano, profesor de Lengua y Literatura de los que conviene seguir bien de cerca.
Es espectacular la simplicidad, suavidad, música y tacto con que está elaborado el vídeo.
Te dejo con él y muy probablemente, después de verlo, entenderás un poco mejor mi pasión por la sucesión de Fibonacci, el número aúreo y, por ende, el título de mi blog.
Maravilloso este v-ideo.
La velocidad de esta presentación impide llegar a lo más profundo del mensaje matemático. He disfrutado mucho de su belleza. Felicidades.
Realmente precioso. No es necesario buscar las Matemáticas, tan sólo es necesario que nos fijemos en todo lo que tenemos cerca para re-descubrirlas. Un saludo a los dos: Eva M
Era inevitable acordarme de este blog (y de su artífice) al ver este vídeo tan creativo. Ya ves que los de Letras también tenemos activa nuestra cardioide 😉
Gracias.